"Baja el Duero por tierra de Zamora, tendido en la llanada y espaciándose por ella, mas al ir a entrar en la provincia de Salamanca, dividiendo a esta de Portugal, hacia donde le rinde el Tormes sus aguas, entre Fermoselle y Villarino, se mete en las entrañas de la meseta castellana para ir a entrar en tierra portuguesa. Resquebrájase la meseta en hondos desgarrones, mostrando al descubierto sus berroqueñas entrañas, pedernosos cimientos de la ceñuda tablada de Castilla. El agua terca, que talla las rocas gota a gota a con secular trabajo, ha ido carcomiendo su peñascoso lecho y buscando salida entre esguinces y revueltas. A la distancia nadie adivina el hondo tajo por donde el Duero corre; la ondulante llanada parece ir a perderse suavemente y sin solución alguna de continuidad en las estribaciones de la sierra de la Estrella, que cierran, hacia Portugal, el horizonte. En uno de los repliegues de ese terreno se ocultan los hondos tajos, las encrespadas gargantas, los imponente cuchillos, los erguidos esfayaderos, bajo los cuales, allá, en lo hondo, vive y corre el Duero
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1 comentario:
Gracias...
Neuss, muy buena documentación. Me alegro que te haya gustado, la verdad, es que es una maravilla el lugar, confluyendo, Salamanca (que es la que tiene menos parte... digamoslo así), Zamora y Portugal, y si... se va en una pequeñita embarcación, es un lujo para los sentidos.
Como digo siempre. ¡España pero qué bonita eres! Cada lugar como las personas con su singularidad...
besos, para mi, Neuss, que para mí es muy especial... ¡No me protestes!!, jajajajajaja...
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